Hace 212 años, siete de las diez provincias pertenecientes a la Capitanía General de Venezuela declararon su independencia de la Corona de Española, estableciendo una nueva nación basada en principios republicanos y federales, aboliendo para siempre la monarquía bajo los valores de la igualdad de los individuos.
Todo comenzó con el movimiento revolucionario y popular de Caracas, el 19 de abril de 1810, jueves Santo, en reacción al nombramiento de Vicente Emparan como gobernador de la Capitanía General de la República, en representación de la Junta Suprema Central de España.
El pueblo e importantes sectores de las fuerzas armadas rechazaron el mandato de Emparan por continuar su fidelidad con el rey Fernando VII, tomaron el Cabildo de Caracas y exigieron su renuncia. Esta acción superó el ámbito de la provincia de Caracas al sumarse otras lo que implicó la ruptura definitiva con la colonia española.
Es el 2 de mayo de 1810 cuando se instala el primer Congreso de Venezuela que oficializa la primera República e inicia la Guerra de Independencia. Dicho movimiento revolucionario tuvo un impacto no sólo de Venezuela, sino en el resto de toda Sudamérica.
La gesta independentista se ve cristalizada a través de la firma del Acta de la Declaración de Independencia, el 5 de julio de 1811, donde siete provincias españolas declaran ser independientes de la Capitanía General de Venezuela.
El acta fue redactada por Juan Germán Roscio y Francisco Isnardi, ratificada por el Congreso el 7 de julio de 1811, y pasada al libro de Actas el 18 de agosto de 1811, en Caracas.
La nueva nación que esta declaración proclamó sería la Confederación Americana de Venezuela, posteriormente con la promulgación de la Constitución Federal de 1811 oficializaría el nombre de la nación como Estados de Venezuela.
Dato: El Acta, elaborada por Juan Germán Roscio y Francisco Isnardi, fue aprobada el día 7 de julio por todos los diputados, con la sola excepción del padre Manuel Vicente Maya, diputado por La Grita. Poco a poco la fueron firmando los representantes, hasta que el 18 de agosto estamparon las últimas firmas. Es por esto que al referirse al 5 de julio no debe decirse «día de la firma del Acta de Independencia», porque no es verdad. Lo correcto es: 5 de julio. Declaración de la Independencia.