Si estás leyendo esto y llegaste a usar algún videojuego de la década de los 1990 o 2000, seguro que recordarás que había una opción para jugar contra “la máquina” o “la computadora”. Esto sucedía, sobre todo, en juegos de peleas, de deportes o de combate, y era común ver cómo este rival preconfigurado podía llegar a comportarse de manera errática o a tener acciones repetitivas que hacían fácil vencerle una vez que las identificabas.
Pues bien, aunque no es el ejemplo más idóneo de Inteligencia Artificial en los juegos, sí ilustra bien cómo la incursión de un rival preprogramado podía poner a prueba tu destreza. Hoy, la AI (como se suele abreviar a la Inteligencia Artificial por sus siglas en inglés) se ha desarrollado tanto en el entretenimiento que ha llegado a superar ya a los jugadores humanos. Hace cinco años, una noticia resaltaba en sitios de noticias como en revistas académicas por igual: Pluribus, un programa computacional creado por Noam Brown y Tuomas Sandholm y configurado para aprender a jugar Texas Hold-em, logró vencer a jugadores de póker de élite, demostrando ser mejor que los jugadores humanos a lo largo de miles de partidas.
Con este panorama, está prácticamente asegurado que el mundo del poker online cambiará tal y como lo conocemos actualmente. No solo por la posibilidad de enfrentarte a jugadores automatizados mucho más competitivos y con posibilidad de aprender sobre la marcha, también por cómo puede cambiar la estrategia durante una partida en línea.
La llegada de la AI al póker no es una imposición, es casi un deseo de los jugadores más habituales. Una encuesta del sitio Legal US Poker Sites reveló que el 93 por ciento de la muestra –más de mil jugadores con al menos tres años de experiencia– está a favor del uso de la Inteligencia Artificial en las partidas de póker. De hecho, el 45 por ciento de personas de ese mismo sondeo respondieron que ya han usado la AI para “mejorar sus estrategias de juego y su porcentaje de partidas ganadas”.
Y aunque no seas un entusiasta o un habitual en los temas de Inteligencia Artificial, seguro que has oído hablar del ChatGPT. Pues bien, 22 por ciento de los en participantes de la encuesta de Legal US Poker Sites admitieron haber usado dicha herramienta de AI para ganar partidas de póker. Y aunque la palabra “admitieron” evoque algún sentimiento de culpa, la realidad es que utilizar ChatGPT en una partida de póker online no es necesariamente hacer trampa. Lo explicamos en el siguiente párrafo.
“Warzone”, una de las entregas más populares de la saga de videojuegos de disparos y guerra “Call of Duty”, es famosa no solo por su arrastre entre los usuarios en línea, sino por la gran cantidad de jugadores suspendidos o vetados de la plataforma por hacer trampa. ¿La principal herramienta para ello? El llamado “aimbot”, un hackeo en el videojuego que hace que quien lo utilice pueda disparar sin fallar, pero sin esfuerzo alguno. Ahora bien, ¿un jugador que utiliza ChatGPT puede ser equiparable a cualquier ejemplo de jugadores tramposos de “Warzone”? Los expertos concluyen que no.
Porque, hasta este momento, usar este tipo de AI tiene un aspecto de consulta más que de asistencia desleal. “Los jugadores acceden a ChatGPT a través de su dispositivo móvil u otra ventana para ayudar a tomar decisiones más acertadas. El modelo de lenguaje tiene capacidad de dar respuestas similares a las humanas al instante, por lo que se puede recurrir al chatbot para ayudar a simular diferentes escenarios, experimentar con diversas estrategias, brindar consejos simples sobre la acción y determinar los montos de las apuestas”, apuntó el estudio de Legal US Poker Sites.
Aunque la inserción de la Inteligencia Artificial en muchos ámbitos de nuestra vida cotidiana nos puede dar pavor o pánico, no hay por qué pensar que Skynet se hará con el dominio del mundo. Y así puede ser en el póker en línea: aunque parezca que cambiará el juego de forma negativa, le puede traer muchos beneficios. Un análisis mucho más expedito y acertado de las partidas con ayuda de softwares de AI pueden ayudar a los usuarios a crear nuevas estrategias, mucho más consistentes y menos “al vapor”.
No obstante, esto tiene que venir acompañado de una regulación de dichas herramientas. Como ya se ha podido comprobar en otros ámbitos, es muy probable que la gente haga uso indebido de la AI para su propio beneficio o para obtener ventajas de forma injustificada. Queda en manos de las autoridades y los sitios de juego crear sistemas y reglamentaciones que mantengan a raya a estos usuarios y prácticas indeseables.
